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Cariño eres multimillonario

Capítulo 286
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Capitulo 286: Amistades Superficiales

Don Rall, el homenajeado del dia, era esperado por todos los invitados. Descendié lentamente desde el segundo

piso en un elevador de cristal, capturando la atencién de todos.

Antes de salir del elevador, don Raul pidié a Federico que lo ayudara a levantarse, revelando asi a todos el traje

que llevaba puesto.

La sorpresa era evidente en el rostro de Alonso al ver el traje que supuestamente estaba dafiado. Al ver a don

Rall salir del elevador, Alonso se apresurd a su encuentro, ofreciéndole su brazo.

-Abuelo, ese traje...

Al estar a su lado, Alonso no pudo evitar preguntar.

“Valen lo arreglo hace un momento, -respondié don Rall con voz suave y un tono amable.

Alonso, instintivamente, dirigié su mirada hacia el lugar donde antes estaba el dafio, su alegria por ver a su

abuelo usando ese traje se transformé en preocupacion al darse cuenta de que Valentina estaba

presente.

(Como es que no la habia visto? En su afan por atender a los invitados, Alonso habia pasado por alto a Valentina

en varias ocasiones, perdiéndose la oportunidad de encontrarse con ella.

Sin poder localizar a Valentina, la preocupacion de Alonso crecia, pero en ese momento no podia dejar el evento

para buscarla y solo le quedaba acompanar a don Raul entre los invitados.

La vista de Aitana sobre el traje congel6 su sonrisa inicial. Lucia, a su lado, noté su camde

expresion y no pudo evitar expresar su sorpresa.

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-Aitana, jqué te pasa? Te ves palida. -Lucia desconocia la historia detras del dadel traje, pero

conocfa el disefio.

-Ese diseque Valen cre6 para el traje realmente es excepcional. Abuelo luce increible hoy, y seguramente

piensa en Valen. Si hubiera sabido, yo también habria disefiado un broche que combinara con ese traje para

brillar junto a Valen. -Los elogios de Lucia hacia Valentina tenfan un claro propésito:

provocar.

Como esperado, Aitana se mostraba cada vez mas molesta. Sin embargo, se cuenta de que cualquier

emocién que mostrara podria ser interpretada y magnificada por los invitados, por lo que reprimi6 su disgusto

sin prestar atencion a Lucia y, al igual que Alonso, se dirigié hacia don Rall.

-Abuelito, te ves muy elegante con ese traje, dijo Aitana con una sonrisa radiante.

Colocandose al otro lado de don Rall, con Alonso a su izquierda, la imagen de los tres generaba una

atmosfera armoniosa.

-Don Rall es muy afortunado, con un sefor Valenzuela tan capaz y una Aitana tan encantadora, la

familia Valenzuela tiene un futuro brillante, -comentaban los invitados, elogiando a Alonso Parecia que solo ellos

eran el foco de atencion, dejando a Lucia al margen.

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+15 MONUS

Aitana.

Lucia sentia una mezcla de frustracién y deseo de unirse a ellos, pero no sabla dénde colocarse entre Alonso y

Aitana. Con un momento de duda, Lucia se acercé con una sonrisa.

-Abuelito, también adoro tu traje de hoy, la eleccién de mi hermano fue excelente.

Al elogiar la seleccién de Alonso, indirectamente alababa el trabajo de Valentina. La presencia del traje era un

recordatode Valentina, ahadiendo tension a Aitana. Don Raul mostraba una sonrisa llena de nostalgia,

mientras Aitana trataba de ocultar su disgusto, aunque Lucia notaba los breves momentos de tristeza y

descontento en ambos, captando la tensién subyacente.

-Lucia, ven aqui, -sefialé don Radl, invitandolos a reunirse.

Lucia miré a ambos lados de don Rall y se colocé junto a Aitana con naturalidad. A pesar de que Aitana llevaba

la sangre de la familia Valenzuela, habia crecido en la familia Lancaster, una familia adinerada, pero su porte no

se comparaba con el de Lucia.

Ademas, el aspecto fisico de Aitana no le favorecia. Cuando Lucia se uni6 a ellos, la diferencia era evidente a

ojos de los invitados. Aunque nadie lo mencionaba abiertamente, las miradas hacia ambas jévenes eran

bastante elocuentes.

Aitana sinti6 crecer su disgusto ante las miradas de los invitados y, aprovechando un momento de felicitaciones

hacia don Rall lanzé una mirada fulminante a Lucia.

-¢Por quémiras asi? -Lucia se acercé a Aitana como si compartieran un secreto.

-Lucia, sé que no estas contenta con que yo asuma el cargo de directora general de Joyeria Valenzuela. No lo

necesito, pero hoy, en el gran dia del abuelo, no deberias opacarme, -le reproché Aitana, quien usualmente

mostraba una fachada amable hacia Lucia, pero hoy sentia una nueva

confianza en si misma.

-¢Opacarte? -Lucia sonrié con incredulidad-. Hoy es el cumpleafos del abuelo, ;como puede ser tu momento?

Lucia, recordando algo, continu despreocupadamente.

-Ah, te refieres al camde apellido. Pero, ;qué importancia tiene? Cambiaste de Suarez a Valenzuela, pero mi

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hermano y yo llevamos el apellido Valenzuela desde hace mas de veinte afos.

Lucia dejaba claro que tanto ella como su hermano ya tenian un lugar establecido dentro del Grupo

Valenzuela.

Aitana, entendiendo el mensaje, record la promesa hecha a Estrella la noche anterior junto a su abuelo y. sin

decir nada, su mirada desafiante hacia Lucia decfa «ya veras».

Ambas mantenian sonrisas en sus rostros, provocando comentarios de admiracién entre los invitados sobre lo

cercanas que parecian. Don Rall, al ver esto, se sentfa complacido.

-Alonso y Lucia siempre han sido muy carifiosos con esta hermana menor. Como saben, nuestra familia

Valenzuela ha sido reducida: mi Unica hija desaparecié y tardamos en encontrarla. Afortunadamente, el destino

La mencién de partida caus6 preocupacion entre los presentes.

Aitana, incapaz de contenerse, protesto.

-Abuelo, estas muy sano, seguro vivirds muchos afios mas. Acabo de regresar a casa; tienes que prometerme

que estards conmigo mucho tiempo.

Su capacidad para hacerse la encantadora era insuperable, alegrando inmediatamente a don Raul quien

aseguro.

-Por supuesto, estaré contigo.

-Hoy celebramos mi cumpleafos y agradezco a todos por acompafarnos. Aitana, siendo parte de nuestra

sangre, naturalmente debe llevar el apellido Valenzuela. Asi que aprovechemos esta reunién, y frente a los

medios presentes, formalicemos su pertenencia a nuestra familia.

-Federico, trae el arbol genealdgico, -ordené don Raul.

Federico presenté el documento, un arbol genealdgico de oro con incrustaciones de gemas y esmeraldas, un

objeto de asombro para los invitados, destacando el prestidel Grupo Valenzuela como una de las tres

grandes familias de Guadalajara.